El presidente electo José Antonio Kast y el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, sostendrán una conversación telefónica que es vista como un hito simbólico para la eventual normalización de las relaciones Chile-Israel, tras el distanciamiento impulsado durante el gobierno de Gabriel Boric. La llamada estaría siendo coordinada entre la cancillería israelí y el equipo del mandatario electo.
Netanyahu ya adelantó públicamente su postura al escribir en redes sociales: “Israel espera trabajar estrechamente con usted y con Chile para profundizar la cooperación en seguridad, innovación, agua, agricultura y crecimiento económico”. Aunque el contacto es de carácter protocolar, en el mundo diplomático se interpreta como una señal de giro respecto de la política exterior chilena reciente, marcada por duras críticas a la ofensiva israelí en Gaza.
La Comunidad Palestina de Chile reaccionó con un comunicado crítico ante los preparativos del diálogo, advirtiendo que “sostener una conversación política con Benjamín Netanyahu (…) significaría un quiebre explícito con la tradición diplomática y jurídica del Estado de Chile”. La declaración plantea que el contacto podría interpretarse como una señal contradictoria con la defensa histórica del derecho internacional y los derechos humanos.